El Programa de la región árabe del KAICIID organizó tres eventos simultáneos en Ammán, Jordania, entre el 25 y el 29 de marzo de 2022. Los tres eventos contaron con una amplia participación de activistas y líderes religiosos de toda la región con diversos orígenes y afiliaciones religiosas. Aunque los actos tuvieron lugar al mismo tiempo y en el mismo lugar, cada actividad fue única por su impacto y valor.

Los eventos, un curso de formación de becados, un curso de formación de "She for Dialogue" y la reunión anual del Comité Directivo de la Plataforma Interreligiosa para el Diálogo y la Cooperación en el Mundo Árabe (IPDC, por sus siglas en inglés), apoyada por el KAICIID, supusieron un hito para el Programa de la región árabe del KAICIID y para las actividades interreligiosas y la participación de las mujeres en la región.

En la reunión del IPDC, se debatieron y presentaron los logros más destacados de la plataforma en la región árabe en 2021, al tiempo que se esbozaron sus planes para 2022. En la reunión también se abordaron las formas de reforzar las asociaciones estratégicas con organizaciones confesionales nacionales e internacionales, centros de investigación e instituciones académicas.

El evento acogió la segunda formación del Programa de Becas y permitió a los participantes reunirse en persona por primera vez después de conocerse en la primera formación, que se realizó en línea. En la formación participaron 17 becados de habla árabe procedentes de ocho países árabes diferentes que se reunieron para debatir temas relacionados con el diálogo interreligioso, con el objetivo de capacitarlos para poner en marcha iniciativas de diálogo interreligioso en sus comunidades locales. Esto incluyó la formación sobre los principios, las herramientas y las metodologías de análisis de conflictos, además de los enfoques de prevención, resolución y transformación de conflictos.

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Las mujeres en el frente y en el centro del KAICIID

El KAICIID cree firmemente en el papel de las mujeres en la consolidación de la paz y el diálogo interreligioso, por lo que el evento acogió una formación para las participantes del programa She for Dialogue en colaboración con el IPDC. 17 mujeres de cinco países árabes diferentes fueron invitadas al evento en Ammán, con el objetivo de fortalecer sus habilidades de negociación y facilitación, así como capacitarlas para promover los valores de la convivencia, la cohesión social y la ciudadanía común.

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Una participante de la iniciativa "She for Dialogue" expuso su opinión sobre las cualidades y capacidades de las mujeres que las hacen más influyentes en el diálogo interreligioso, la resolución de conflictos y la consolidación de la paz. Judi Sabat, asociada de comunicaciones del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Siria, sostuvo que "no hay cualidades o capacidades universales que hagan a las mujeres más eficaces en este ámbito, sino que cada comunidad tiene sus propias necesidades".

Sin embargo, añadió, "se puede decir que tener habilidades de comunicación es clave, incluidas las de negociación y facilitación". Sabat también destacó que entender la dinámica del conflicto es vital. En cuanto al papel de la comunidad en la inclusión de las mujeres en este campo, dijo que la sensibilización sobre el papel de las mujeres en la construcción de la paz allanaría el camino para una mayor inclusión.

    Raghad Al-Hamedawi, de Irak, afirmó que hay que "reforzar las capacidades de las mujeres para que puedan asumir más protagonismo en la negociación y la resolución de conflictos".

    Al-Hamedawi también cree que es fundamental que las mujeres tengan experiencia práctica en la resolución de conflictos y adquieran conocimientos sobre el entorno social, económico y cultural en el que se desenvuelven.

Sin embargo, esto no es fácil para las mujeres, no sólo en el mundo árabe sino también a escala mundial. Sabat afirmó que las mujeres se enfrentan a "retos sociopolíticos y económicos que se manifiestan en la ausencia de representación femenina en la sociedad civil", y añadió que la estereotipación de las mujeres y su restricción a los roles de género socialmente construidos siguen siendo la principal razón de la limitada participación femenina. Sabat también cree que "la mala interpretación de los textos religiosos contribuye a menudo a la exclusión de las mujeres de las actividades de construcción de la paz y resolución de conflictos". Sabat considera que la participación de las mujeres en el diálogo interreligioso es "una necesidad, no un lujo".

Raghad considera que la participación de las mujeres es una oportunidad para integrar la perspectiva de género en las iniciativas de consolidación de la paz para hacerlas más inclusivas y sostenibles. En cuanto a la resolución de los retos a los que se enfrentan las mujeres, Raghad cree que pueden abordarse en parte mediante la aplicación de planes nacionales para la Resolución 1325 del Consejo de Seguridad, paralelamente a la defensa de una mayor participación de las mujeres en las iniciativas de consolidación de la paz a nivel comunitario.

Waseem Haddad, director del Programa para la región árabe, subrayó que el KAICIID cree sinceramente que las mujeres son parte integrante de cualquier diálogo interreligioso y proceso de consolidación de la paz, y que las mujeres son esenciales para lograr una paz sostenible.

Haddad explicó que la iniciativa She for Dialogue se puso en marcha para empoderar a las mujeres de la región árabe y ayudarlas a formar parte de la promoción del diálogo entre comunidades de diferentes afiliaciones religiosas.