"La Junta Directiva del KAICIID está conmocionada y entristecida por la creciente violencia en Jerusalén, Gaza y Cisjordania, y lamenta la muerte de más de 62 personas, entre ellas catorce niños, que han perdido la vida como consecuencia de la misma. La violencia se desencadenó por los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los manifestantes en la mezquita de Al-Aqsa de Jerusalén, un lugar de gran importancia para los musulmanes. El hecho de que este lugar, conocido también como el Monte del Templo, sea tan querido por los judíos como por los cristianos, exige que las tres confesiones reafirmen su deber de cuidado hacia su significado religioso universal, así como entre sí, en este difícil momento.

 "La Junta insta a ambas partes a que tomen medidas inmediatas para reducir la intensidad de este enfrentamiento y facilitar el acceso a los fieles ahora que el mes sagrado del Ramadán se acerca a su fin. La Junta pide a todas las partes que cuiden y respeten los lugares de culto. La Junta hace un llamamiento a todos los líderes para que se manifiesten en contra de los discursos de odio y de los actos de violencia e incitación, y condenen y combatan todo intento de avivar las tensiones interreligiosas con el fin de desencadenar un conflicto.

"La importancia histórica y espiritual universal de este lugar debería ser un símbolo de unidad religiosa en la diversidad, y no un foco de violencia y división. Debe inspirarnos para encontrar y cultivar los valores comunes a todas las religiones: valores de paz, tolerancia y comprensión".