Por primera vez en la historia de las relaciones entre el Reino de Arabia Saudí y la Santa Sede, el Custodio de las Dos Mezquitas Sagradas, el Rey Salman bin Abdulaziz, recibió el 18 de abril de 2018 en Riyadh a una delegación de alto nivel de la Santa Sede, encabezada por el Cardenal Jean-Louis Pierre Tauran. Arabia Saudí es uno de los Estados fundadores del Centro Internacional de Diálogo (KAICIID), y la Santa Sede es el Observador Fundador del Centro.

El Cardenal Tauran, Presidente del Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso, estuvo acompañado por el Obispo Miguel Ayuso, Secretario del Consejo Pontificio, quien también actúa como representante de la Santa Sede en el Consejo de las Partes y la Junta Directiva del KAICIID, así como Monseñor Khaled Akasheh, miembro del Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso y miembro del Foro Consultivo del KAICIID.

Participaron en la reunión el Príncipe Abdulaziz bin Saud bin Naif bin Abdulaziz, Ministro del Interior de Arabia Saudí, el Secretario General de la Liga Mundial Islámica, Mohammad Ibn Abdulkarim Alissa, y el Ministro de Asuntos Exteriores de Arabia Saudita, Adel bin Ahmed Al-Jubeir.

Participación de alto nivel

Durante su visita oficial a Arabia Saudí, el Cardenal Tauran también se dirigió a la Liga Mundial Islámica subrayando que la religión nunca deber ser mal utilizada para justificar la violencia o el terrorismo, pues estos destruyen vidas: tanto de las víctimas como de quienes cometen esos actos. También afirmó que todas las religiones deben recibir un mismo tratamiento, sin discriminación, pues sus seguidores, al igual que los ciudadanos que no profesan ninguna religión, deben recibir un trato igualitario. La delegación del Vaticano recibió asimismo un informe del Centro Internacional de Lucha contra la Ideología Extremista (Etidal).

Gratitud por el compromiso

El Cardenal Tauran, Monseñor Ayuso y Monseñor Akasheh se reunieron en Riyadh con el Secretario General del KAICIID, Faisal bin Muaammar. El Cardenal Tauran destacó: “Con el KAICIID, el Vaticano tiene una relación de larga data y profunda. Somos más que amigos: somos hermanos y hermanas. En el mundo en que vivimos, considero que es importante mostrar que es posible vivir, trabajar y construir juntos, cristianos y musulmanes. Si observamos la historia, cuando los musulmanes y los cristianos estuvieron en armonía, el mundo cambió y creó grandes civilizaciones. Ahora tenemos que mostrar y enseñar a la generación joven que la pluralidad no es una amenaza sino una riqueza”.

Recordando los cinco años de colaboración del Vaticano con el KAICIID, el Obispo Ayuso sostuvo: “He visto cómo, mediante diversas actividades en distintos niveles y en varios continentes, el KAICIID ha puesto en marcha actividades e iniciativas de mucho valor, por ejemplo, programas de becas para la paz y la reconciliación. Esto ha permitido al Centro situarse como un referente, un promotor del diálogo intercultural e interreligioso en el mundo. Animo a todos a crear juntos una red de colaboración a través del KAICIID, de la Liga Mundial Islámica y del Centro Nacional de Diálogo, para poder crear juntos un mundo mejor”.

El Secretario General bin Muaammar felicitó a la Santa Sede y al Reino de Arabia Saudí por el paso histórico dado en la promoción del diálogo interreligioso. Asimismo, agradeció al Reino de Arabia Saudí y a la Santa Sede por su cooperación y compromiso de larga data con el Centro, afirmando: “Para el Centro es un verdadero privilegio contar entre sus Estados fundadores a la Santa Sede, el Observador Fundador, y, en particular, poder contar con el apoyo del Papa Francisco, el Papa Emérito Benedicto, el Cardenal Tauran y el Obispo Ayuso”.

Bin Muaammar también felicitó a la Liga Mundial Islámica y a Mohammad Ibn Abdulkarim Alissa por su iniciativa y el papel central que desempeñó en la histórica visita del Vaticano a Arabia Saudí.

Primera visita histórica

El 8 de mayo de 2017, Arabia Saudí actuó como anfitriona de una reunión del Consejo de las Partes del Centro Internacional de Diálogo (KAICIID), en la que participaron Austria, España y la Santa Sede como Observador Fundador.  Esa reunión constituyó la primera vez en la historia de Arabia Saudí en que representantes de la Santa Sede visitaron oficialmente el Reino. La delegación de la Santa Sede en esa ocasión incluyó al Obispo Ayuso y a Monseñor Antoine Camilleri, Subsecretario de Relaciones con los Estados de la Santa Sede.