Los miembros del Programa de Becados del KAICIID en 2020 han celebrado su graduación en una ceremonia en Lisboa.
El evento celebrado en Portugal marcó el final del programa de formación y desarrollo, que duró dos años debido a la pandemia del COVID-19, y en él los becados de todo el mundo se reunieron para reflexionar sobre lo que habían aprendido y logrado.
La ceremonia de graduación contó con un mensaje de bienvenida de Elham Alshejni, secretaria general Adjunta Interina del KAICIID, y un discurso de apertura de la Alta Comisionada para la Migración en Portugal, Sonia Pereira.
"A través de la educación, el desarrollo de capacidades, la formación y muchas otras oportunidades para la innovación y la creatividad, el KAICIID capacita a los becados como poderosos agentes para el cambio social, equipándolos para abordar los desafíos tanto a nivel local como regional", dijo Alshejni en su mensaje de bienvenida.
"Qué mejor lugar para celebrar esta ceremonia que Lisboa, una ciudad que durante muchos siglos ha sido testigo y se ha construido sobre el encuentro y los intercambios continuos entre culturas y religiones y que es también un punto de vista estratégico para promover el diálogo entre Europa, África, Asia y América", dijo Pereira.
Antes de la ceremonia, los becados de 2020 se sometieron a una última ronda de formación centrada en la evaluación y la sostenibilidad, y visitaron tres lugares religiosos de la capital portuguesa: La Iglesia de São Domingos, la Catedral de San Pablo y la Mezquita Central de Lisboa.
El Programa de Becas pretende dar a sus participantes las herramientas, la experiencia, las oportunidades de crear redes y los conocimientos necesarios para diseñar y promover proyectos de diálogo interreligioso en sus países de origen, así como formar a sus propios alumnos para que se conviertan en promotores de la paz y líderes de la colaboración interreligiosa.
El programa también pretende establecer una red mundial sostenible y duradera de personas de diferentes tradiciones religiosas y orígenes culturales, especialmente en zonas donde las tensiones sectarias son elevadas y la amenaza de conflicto es constante.
Reflexionando sobre lo que ha aprendido durante el programa 2020, Muhamad Menya Balonde, becado del KAICIID y profesional interreligioso de Uganda, dijo: "Amar a otros credos es una obligación en todas las escrituras religiosas, pero odiar a alguien por una diferencia de creencias es una elección individual".
El Programa de Becas de 2020 estuvo compuesto por tres grupos - "África", "Asia Meridional y Sudoriental (SSEA)" e "Internacional"- y contó con 61 participantes, entre los que se encontraban líderes religiosos, educadores y profesionales del diálogo. El grupo representa a seis religiones diferentes: Budismo, Cristianismo, Hinduismo, Judaísmo, Bahai e Islam.
A lo largo del año, cada grupo asistió a numerosas clases en línea y cursos virtuales, junto con una sesión de formación residencial orientada al diálogo interreligioso e intercultural. La cohorte de África, la cohorte de SSEA y la cohorte internacional se reunieron en Addis Abeba (Etiopía), Colombo (Sri Lanka) y Viena (Austria) respectivamente.
Entre este último grupo se encontraba Nancy Cecilia Falcon. "Durante el Programa de Becados del KAICIID, aprendí que, a pesar de nuestras diferencias, podemos trabajar juntos para lograr la paz", dijo Falcón, que procede de Argentina.
Jonás Shalom, también de Argentina, comparte el entusiasmo de su compatriota. "El Programa de Becados no sólo capacita en un nivel profundo de diálogo interreligioso, sino que también nos inspira a construir proyectos nuevos y creativos", dijo.
Un elemento clave de la formación para el diálogo del KAICIID es la financiación que se proporciona a los participantes para que puedan poner en marcha iniciativas de base en sus comunidades de origen.
En conjunto, los Becados 2020 diseñaron e introdujeron 61 proyectos diferentes, incluyendo sesiones de formación para el diálogo, conferencias, charlas y visitas sobre el terreno. También se produjeron varias piezas de material educativo, como obras de arte, publicaciones escritas y documentales.
Más de cuatro quintas partes de las iniciativas trabajaron directamente para promover el diálogo interreligioso, con 23 dirigidas al diálogo intrarreligioso, 36 centradas en la educación interconfesional y la libertad de religión y creencia, y 17 dedicadas a la investigación interreligiosa.
Los proyectos de base abordaron directamente los problemas a los que se enfrentan más de 13.000 personas, e indirectamente se dirigieron a más de 100.000 individuos en 31 países. Todos ellos concienciaron sobre la importancia de la cooperación interreligiosa e intercultural para abordar los problemas locales, regionales y mundiales.
Todo esto se logró a pesar de los enormes desafíos que presentó la pandemia. Sorteando una gran cantidad de obstáculos relacionados con la COVID-19, los becados fueron capaces de ejecutar sus planes de forma segura, inspirando a las comunidades locales y defendiendo la coexistencia pacífica a través de la lente del diálogo.
"Los becados de 2020 pasarán a la historia del Programa de Becas del KAICIID como una de las promociones más resistentes, esperanzadas, decididas y creativas", dijo Kyfork Aghobjian, Director de Proyectos de Becas del KAICIID. "Su compromiso constante con el programa durante los últimos 26 meses ha reafirmado la noción de que cuando hay voluntad, hay un camino", añadió.
Tras graduarse del programa, los becados de 2020 se unirán a la Red de Antiguos Alumnos. Allí seguirán aprendiendo y colaborando entre ellos, además de continuar su trabajo de base con iniciativas a pequeña escala que promuevan el diálogo en un contexto local.
"Después de dos años, los becados de 2020 finalmente se gradúan, y estamos encantados de darles la bienvenida a la comunidad de becados Alumni", dijo Sneha Roy, Directora del Proyecto de Becas del KAICIID. "Valoramos sus capacidades individuales, sus colaboraciones y sus amistades, y esperamos recorrer juntos el camino para seguir comprendiendo y comprometiéndonos con el diálogo interreligioso".
Lisboa fue un lugar apropiado para la ceremonia de graduación, ya que la ciudad será pronto la nueva sede del KAICIID. En octubre se anunció que el Centro se trasladaría de su actual sede en Viena (Austria) a la capital portuguesa. La mudanza, que tendrá lugar a finales de este año, fue descrita como el comienzo de una "nueva era" por el antiguo secretario general del KAICIID, Faisal bin Muaammar.