Resulta esencial que haya herramientas y procesos adecuados para evaluar los resultados de las iniciativas de diálogo y consolidación de la paz interreligiosa, explica un nuevo libro del Centro Internacional de Diálogo (KAICIID).
Aunque se han hecho algunos progresos, todavía existen importantes lagunas en la alineación de los profesionales del diálogo interreligioso y la construcción de la paz. Por ello, es crucial que se desarrollen marcos y procedimientos de evaluación ética y teórica, concluye Evaluating Interreligious Peacebuilding and Dialogue, una colección de ensayos de código abierto publicada por De Gruyter.
“La religión puede ser una fuerza positiva en la consolidación de la paz. Por ello, la evaluación de la consolidación de la paz interreligiosa es necesaria para identificar las pruebas de que los agentes religiosos están haciendo importantes contribuciones a la paz y la cohesión social", dijo el coeditor, el profesor Mohammed Abu-Nimer, asesor principal del KAICIID.
"Es necesario capacitar a los profesionales y organizaciones del diálogo interreligioso sobre la importancia de integrar métodos y herramientas de evaluación en su trabajo, especialmente sobre cómo identificar su éxito y las pruebas", añadió el profesor Abu-Nimer.
La antología expone dos ventajas fundamentales de la evaluación del diálogo interreligioso y la consolidación de la paz: aumentar la responsabilidad y aprender a ser más eficaces en la consecución del cambio.
La primera, aumentar la responsabilidad, es necesaria para garantizar que las necesidades de los beneficiarios de la consolidación de la paz se satisfagan con un mayor grado de éxito. Asimismo, un mayor nivel de responsabilidad aumentará la capacidad de los profesionales para abordar los cambios de estas necesidades en contextos frágiles y rápidamente cambiantes. Sin embargo, lo más importante es que una mayor responsabilidad ayudará a garantizar que los consolidadores de la paz se adhieran al principio de "no hacer daño", una doctrina diseñada para proteger a las personas vulnerables de riesgos adicionales durante el proceso de construcción de la paz.
El segundo gran beneficio de la evaluación es que proporciona a los profesionales del diálogo interreligioso y la consolidación de la paz la oportunidad de aprender y desarrollar sus habilidades. Este proceso de aprendizaje debe tener lugar a lo largo de todo el ciclo del proyecto, explica el libro, facilitado por la recogida de datos y el desarrollo de indicadores de eficacia en cada etapa.
Para mejorar el proceso de aprendizaje, los profesionales del diálogo interreligioso y la consolidación de la paz deben sentirse capaces de hacer preguntas siempre que surjan lagunas de conocimiento. Del mismo modo, mediante el seguimiento y la evaluación de los resultados, los expertos en consolidación de la paz pueden aprender de sus esfuerzos a medida que trabajan, analizando la situación en diferentes puntos del proyecto, lo que permite gestionar los riesgos y realizar ajustes precisos.
La serie de ensayos explica que la evaluación también puede ayudar a salvar la brecha entre los responsables políticos y los profesionales del diálogo interreligioso y la consolidación de la paz. En el mundo posterior al 11 de septiembre, reunir a estas partes es especialmente importante, dado el papel vital de los líderes religiosos en la resolución de conflictos.
Asimismo, con la aceleración de la crisis climática y la aparición del COVID-19, cabe esperar que los grupos religiosos tengan una función aún mayor en el cultivo de la paz. La publicación muestra que sigue existiendo una problemática desconexión entre los profesionales del diálogo interreligioso y los responsables políticos.
“Los responsables de la formulación de políticas suelen buscar la creación de una paz política centrada en el establecimiento de un nuevo gobierno, el éxito de las elecciones, cuando proceda, y la representación de todas las partes. Los profesionales del diálogo interreligioso se centran más en la curación de la sociedad tratando las percepciones arraigadas del "Otro", que alimentan los prejuicios, el miedo, la desconfianza, el odio y otros sentimientos negativos que perpetúan las divisiones y podrían alimentar futuros conflictos", dijo la coeditora de Evaluating Interreligious Peacebuilding and Dialogue, Renáta Katalin Nelson, oficial de coordinación del KAICIID.
Los ensayos del libro detallan una serie de retos para el fomento de una mayor evaluación de las actividades de consolidación de la paz interreligiosa. El proceso puede ser lento, al igual que el diálogo y la consolidación de la paz interreligiosa son en sí mismos de naturaleza gradual. Existe un gran escepticismo en torno a la necesidad de la evaluación, con una evidente falta de interés por parte de los defensores de la paz religiosos o interreligiosos a la hora de aplicar técnicas de seguimiento y evaluación. Puede haber problemas de "cuadratura del círculo", ya que las prácticas de evaluación utilizadas para los programas tradicionales de construcción de la paz son a veces incompatibles con los proyectos basados en la fe.
También existe el riesgo de que la religión se instrumentalice o se reste importancia. A la inversa, existe el peligro de que se haga demasiado hincapié en el papel de la religión y se pierda el interés por abordar las verdaderas causas de un conflicto. Las lagunas en la literatura sobre las prácticas de seguimiento y evaluación también son problemáticas, al igual que las cuestiones de reconocimiento dentro del campo de la evaluación.
El objetivo fundamental de Evaluating Interreligious Peacebuilding and Dialogue es abordar estos retos. Para ello, contribuye a la nueva bibliografía sobre evaluación, y cada uno de sus siete ensayos aborda los retos (y las oportunidades) del seguimiento y la evaluación desde un punto de vista diferente.
La primera sección del libro examina las complejidades de la consolidación de la paz religiosa e interreligiosa, identificando los obstáculos que dificultan un seguimiento y una evaluación eficaces. La segunda sección describe las herramientas prácticas que se han desarrollado para ayudar a supervisar y evaluar la consolidación de la paz religiosa e interreligiosa, y destaca cómo estas herramientas pueden aplicarse en diferentes contextos.
El libro forma parte de la serie "Más allá del diálogo" del KAICIID, publicada por De Gruyter, cuyo objetivo es acercar a teóricos y profesionales del ámbito del diálogo interreligioso de diversas regiones del mundo.