Las organizaciones confesionales desempeñan un papel crucial en el apoyo a los sectores más vulnerables de la sociedad durante las crisis. Durante esta pandemia mundial, se han encontrado ante una emergencia sin precedentes, que les ha obligado a revisar sus formas de prestar ayuda.
En Marruecos, una audiencia interreligiosa y multicultural de más de 135 estudiantes universitarios, trabajadores de ONG, investigadores y activistas se reunieron en dos seminarios en línea con el objetivo de sugerir formas de ayudar a los vulnerables en estos tiempos difíciles.
Los dos eventos, celebrados en la plataforma online Zoom el 28 de noviembre y el 13 de febrero, contaron con el apoyo del KAICIID a través de su Programa Diálogo-60, que promueve el diálogo y la cooperación interreligiosa e intercultural en el mundo árabe.
"Los seminarios tenían como objetivo mejorar el conocimiento sobre el papel de las instituciones religiosas e interculturales, así como sobre los retos a los que se enfrentan en estos tiempos de crisis", afirma el Dr. Sali Bouba Oumarou, investigador en ciencias políticas que coordinó los eventos online.
"También nos centramos en el impacto de esta emergencia en las cuestiones migratorias en Marruecos y en la importancia del diálogo interreligioso y la promoción de un espíritu de tolerancia en este complejo contexto".
La sociedad marroquí, dice el Dr. Oumarou, ha sufrido profundamente el impacto de la pandemia y las restricciones impuestas para limitar su propagación.
"Si uno mira las noticias de los medios de comunicación sobre la actual crisis sanitaria, encontrará muy poca información, si es que hay alguna, sobre la labor de las instituciones religiosas y los líderes religiosos, pero fueron de los primeros en actuar y unirse para ayudar a los más vulnerables", explica el Dr. Oumarou.
En el primer seminario, los panelistas y los participantes destacaron la necesidad de que los actores religiosos adopten formas innovadoras de promover su trabajo y llegar a las personas necesitadas. Aunque la mayoría de las organizaciones se apresuraron a utilizar plataformas y herramientas tecnológicas en línea, algunas de ellas todavía se están adaptando a este proceso, constataron.
"Aunque los agentes y las organizaciones religiosas han sido capaces de aplicar, hasta cierto punto, las nuevas formas de operar impuestas por la pandemia, por ejemplo, predicando, celebrando misas y ofreciendo otros servicios en línea, la mayoría de sus comunicaciones con la gente dentro de sus comunidades siguen siendo demasiado clásicas y tradicionales", explica el Dr. Oumarou.
Según las recomendaciones emitidas al término de ambos seminarios, las administraciones deben acompañar y facilitar los esfuerzos de las organizaciones religiosas e interculturales en su búsqueda de soluciones a la crisis.
También entre las recomendaciones emitidas al final del evento, que se compartirán con diversas instituciones y responsables políticos, los participantes pidieron a los actores religiosos que se comprometan con acciones positivas para contrarrestar los temores y prejuicios contra los migrantes y los solicitantes de asilo.
"La pandemia del COVID-19 no ha hecho más que empeorar las condiciones, ya de por sí nefastas, de las personas y poblaciones vulnerables en todo el mundo", afirma Hanane Serrhini, investigadora en derecho migratorio y ponente en ambos seminarios.
"En Marruecos, donde muchos nacionales también han perdido sus empleos y viven sin ingresos, los migrantes, solicitantes de asilo y refugiados se enfrentan a un nivel de vulnerabilidad extremo. Muchos son irregulares y viven en campamentos o centros superpoblados que no cumplen los protocolos sanitarios actuales para la prevención del COVID-19".
Serrhini dice que se alegró de participar en ambos seminarios. "Ambos fueron muy útiles", dijo. "El primero me dio la oportunidad de interactuar con representantes de la sociedad civil que ponen en práctica las teorías que elaboramos los investigadores. El segundo reunió a expertos en diferentes disciplinas, como el derecho y la economía".
Apoyo a las iniciativas locales
Los dos seminarios formaban parte de los 60 proyectos seleccionados por el KAICIID en el verano de 2020 entre 150 solicitudes.
"Es la primera vez que asignamos subvenciones a tan gran escala en la región árabe", afirma el director del programa del KAICIID, Edwar Hanna.
"Esto se debe a que, en 2020, el COVID-19 trajo consigo una nueva realidad y nosotros, como organización internacional, necesitamos ahora contar con socios locales en nuestra lucha contra la pandemia y sus implicaciones".
Hanna dijo que las restricciones de viaje y la imposibilidad de ejecutar proyectos directamente han cambiado el enfoque de la organización hacia un mayor apoyo a las iniciativas locales.
"Queremos que los actores locales lideren las iniciativas de lucha contra el discurso del odio y en respuesta a la crisis del COVID-19", dijo. "Por eso decidimos invertir más en estas ayudas en el último año".
Según el director del programa, los seminarios coordinados por el Dr. Oumarou fueron de especial interés para el KAICIID, ya que analizaron el papel de los líderes religiosos en tiempos de crisis, que es un nicho en el que la organización se ha centrado.
"En las recomendaciones que redactaron, los participantes también se dirigieron a los responsables políticos, pidiéndoles que colaboraran con las organizaciones religiosas y de la sociedad civil. Esta parte de promoción del proyecto nos pareció especialmente relevante".